Poesía, solo sentirla o también interpretarla (I)
Por: J. Miguel Vargas Rosas Hace no mucho, en una capacitación, un representante de la APLIJ-Lima aseveró que discrepaba con aquellos que decían que la poesía debía utilizarse como texto para interpretación lectora. Según él, la poesía debería ser utilizada más para sentirla que para interpretarla. De esto se podría desprender todo un debate, en el que los que hicimos un poco de poesía y los que trabajan el verso, estamos desde ya muy inmiscuidos. Partamos con darle la razón y que efectivamente la poesía es más para sentirla que interpretarla, ¿es posible sentir algo que no entiendes ni comprendes?, ¿es posible sentir algo que no lo tienes en la realidad?, pongamos como ejemplo el enamoramiento; en un momento dado amas a una persona pero no se merece tu llamado amor, por lo que también sientes rencor. A esto, algunos podrían decir que no entiendes dicho sentimiento, que el susodicho está confundido, por lo que no se puede comprender ni entender, pero sí sentir