Extraño caso de amor: un extraño Pavletich en la literatura huanuqueña

 Escrito por J. Miguel Vargas Rosas

    No ha habido ni ha podido surgir en largas décadas, nadie de la talla de Esteban Pavletich en las letras huanuqueñas. Como parte de su lucha contra el conservadurismo feudal predominante en el contexto que le tocó vivir, luchó por innovar las letras y logró adelantarse a su época, muy diferente a un gran porcentaje de autores actuales de Huánuco que ya no luchan contra el sistema, sino que lo asumen como parte implícita de su ser, por lo que acogen, copian y plasman el estilo encumbrado por el canon literario. Pavletich buscó innovar, adelantarse a su tiempo, incluso rompiendo esquemas; en cambio ahora, innovar es copiar los estilos y esquemas de la literatura europea o del ya casi extinto Boom Latinoamericano. Quizá esto sea uno de los motivos para obnubilar la imagen de Esteban Pavletich Trujillo, a quien se le ha encasillado como indigenista dentro de la literatura peruana, lo cual no es ningún demérito, pero habría que reconocerle además la batalla constante en la que se enfrascó por hacer de sus letras, una literatura fresca, juvenil e innovadora. 

    Esa frescura y esa innovación, la hallamos de manera explícita en su relato «Extraño caso de amor», en donde se inserta en las dimensiones más oscuras de la mente humana, a las que el psicoanálisis llama “subconsciente” y con ello desarrolla una novela corta, de lenguaje fluido, popular, pero sobre todo psicológico. Es una especie de «El túnel» de Ernesto Sábato, solo que enriquecida por la descripción de la lucha de clases desatada en el Perú, con un argumento en donde lo policial halla espacio también. El relato es intenso, profundo, como un golpe que te deja flotando en lontananza e increpándote muchas cosas. Lo cual demuestra el trabajo meticuloso de Pavletich para con la literatura, pues la novela en mención sin duda demandó una previa investigación de la psiquis humana, observación de la realidad social y el estudio sociológico de esta.  Se podría argumentar que copió a Sábato, pero de esto no hay indicio alguno, además de que las publicaciones de ambas novelas, muy similares —El túnel y Extraño caso de amor— tiene una diferencia de apenas seis años —1948 y 1954 respectivamente—. Sin embargo, no hay estudio contundente o de importancia acerca de «Extraño caso de amor» o por lo menos de la similitud que guarda con «El Túnel», opacando así el genio de Pavletich. 

Pavletich, a diferencia de Sábato, pugna siempre por demostrar que el entorno —relaciones de producción— están en una relación estrecha de interdependencia con la psicología individual. Así, en este caso, los personajes están ubicados en una clase social determinada y lo que va a plasmar el escritor es la decadencia de esa clase social: la capitalista. Mientras tanto, Sábato delinea también la clase social en la que están inmersos los protagonistas de su novela, pero no profundiza en este asunto, sino que se introduce en la psicología individual, creando cierto misticismo en esta. Pavletich ahonda en las cuestiones de clase, así como aplica o desarrolla los estudios psicológicos más innovadores de su época. 

Si bien es cierto que, «No se suicidan los muertos» es una novela brutal, porque brutal era la realidad del sistema feudal, «Extraño caso de amor» no pierde la brutalidad y crudeza que resultan frecuentes en la narrativa de Pavletich, solo que adosado a esta brutalidad va como etiqueta la oscuridad ramificada de la mente humana, la cual absorbe la brutalidad de la realidad y es esta absorción la que impulsará al hombre a actuar con brutalidad. Esto lo tiene bien claro Pavletich, quien en su ensayo «Hacia nuestra propia estética» habla de la brutalidad desde la óptica sociológica. «Como consecuencia de la imposición brutal de un sistema económico, de instituciones, religión, idioma —españoles— hubo de verificarse la liquidación apresurada y violenta de nuestra cultura vernácula»; enfatizaba Pavletich. Así pues, mientras que Sábato se inclina más por mostrar lo “incomprensible de la mente humana”, a la cual describirá como un túnel oscuro, difícil o casi imposible de entender al momento de detallar el uxoricidio, Pavletich establece una relación entre la mente humana y el entorno objetivo; es decir, si la mente se desarrolla en un mundo brutal, salvaje, violento, la mente sufrirá también de esta brutalidad. Y para Pavletich, precisamente los más proclives a caer en estas acciones, son los de la clase elevada acostumbrados a destruir todo, a explotar, a dominar y a ver sus caprichos cumplidos a como de lugar. 

Asistimos a una figura revolucionaria quien a su vez buscó revolucionar la literatura de su tiempo, porque todo revolucionario verdaderamente revolucionario lo es en todas las áreas, desde la vida personal hasta las obras públicas. No voy a extenderme demasiado, porque podríamos profundizar en el lenguaje ameno y breve que utiliza Pavletich en la novela «Extraño caso de amor», que lo coloca  como uno de los escritores de novelas cortas modernas. Pero, no es mi intención aburrir al lector, además de que en el momento en que escribo, no tengo el libro a la mano para entrar en detalles. Sin embargo, puedo aseverar que no ha habido ni ha podido surgir en largas décadas, nadie de la talla de Esteban Pavletich en las letras huanuqueñas… aún no.